7 de septiembre de 2009

Lobaparda

Lobaparda es un grupo musical que nace en 2006 en la ciudad de Teruel, tras el encuentro casual de cuatro músicos apasionados de los sonidos tradicionales aragoneses y la música folk. Algunos de estos músicos tienen vínculos con el valle del Jiloca, donde residen. A pesar de su juventud, los miembros de Lobaparda tienen una amplia experiencia en este tipo de músicas; grupos como La Birolla, Dulzaineros del Guadalope, ArteSonado, Tintirinullo, Kuatro Kabras Folk…, atestiguan su trayectoria y saber hacer.
Es este nuevo proyecto, Miguel Ángel Royo, José Manuel Alba, Elena Martínez y Chabier Crespo tratan de reavivar los rescoldos de la tradición musical del centro y sur de Aragón, en busca de sonidos atemporales inspirados en los paisajes agrestes del Sistema Ibérico aragonés y en las planicies desoladas de los Monegros y la Ribera del Ebro.
Discografía:
1. Lobaparda. Disco grabado en Marywater, Teruel (2007). Utilizando instrumentos acústicos, además de la voz de Elena, nos invitan a recorrer su propuesta sonora compuesta de romances, dances, villanos…, más allá de límites y convencionalismos. Música “vieja” y “moderna” al mismo tiempo; temas tradicionales arreglados por Lobaparda y otros de composición propia basados en esquemas tradicionales; canciones en las que destaca la voz junto con temas totalmente instrumentales. Contiene: La cardelina; Romance de la luna parda; Marcha de los caballeros de Azagra; Tres hermanicas; Reinau; Romance del caballero ausente y despedida; Danzas de Cubel; La mesacha; Romería de San Antón; Jota hurtada; Villanos; Avecillas. La hermana cautiva. En su página web se pueden descargar algunas canciones.

Ferias en Lituénigo y Trasmoz

Miles de personas han visitado este sábado la comarca de Tarazona para disfrutar de las dos ferias más destacadas de cuantas se organizan dentro del festival ‘Tierras del Moncayo’. Se trata del encuentro de oficios perdidos de Lituénigo y la feria de brujería de Trasmoz, que se vienen celebrando ya desde hace ocho y nueve años, respectivamente.
En Lituénigo, los más madrugadores han asistido a la recreación de la siega y la trilla, uno de los muchos oficios desconocidos por los jóvenes, que han podido comprobar el trabajoso esfuerzo que antaño debían realizar sus padres o abuelos para mantener el hogar.
Una de las novedades de este año ha sido la presencia del guarnicionero –encargado del cuero-, al igual que la recuperación de la figura del pregonero. “Tenía como función informar, a golpe de corneta, de todo lo que acontecía en el municipio”, ha explicado José Luis García, presidente de la Asociación ‘Los Ancebillos’, organizadora del encuentro junto con Ayuntamiento y Comarca.
Por las calles de Lituénigo no han faltado los demás oficios representados en el Museo del Labrador: esquilador de ovejas, alfarero, cestero, apicultor, herrero, cantero, afilador, aguador... Además, las mujeres del pueblo han elaborado artesanalmente chorizos y morcillas que, por la tarde, han degustado cientos de personas. Un año más A Borina Moncaína amenizó con su música la Feria.

Mientras, a pocos kilómetros, Trasmoz ha acogido su noveno encuentro de brujería, que ha dado comienzo al mediodía, con la lectura del pregón a cargo de la Bruja del Año. Y es que, esta población, famosa por su castillo y Gustavo Adolfo Bécquer, presume con orgullo de todo lo relacionado con lo mágico. De hecho, un buen número de mujeres y algún que otro hombre se han vestido para la ocasión de bruja, escoba y sombreros incluidos.
Ha habido campamento medieval y un mercado esotérico con videntes y lectores de manos que, a más de uno, ha escudriñado el futuro. Por los diferentes puestos ha sido posible comprar con la moneda propia de la feria: el maravedí falso de Trasmoz, que acuñó en el siglo XIII Blasco Pérez, clérigo, falsificador y alquimista, delito del que fue acusado por el rey Jaime I. “La gente lo utiliza y siempre se queda algunos como recuerdo”, ha comentado Puri Fraca, presidenta de la Asociación ‘El Embrujo’, principal impulsora del encuentro.
Durante esta tarde-noche, no han faltado los combates medievales, capturas de herejes y brujas o un aquelarre junto a las murallas del castillo, construido en el siglo XII. Además, la actuación de ‘Baluarte Aragonés’, con su obra ‘Independencia’, ha atraído a un buen número de espectadores. La feria, por vez primera, se ha despedido con un espectáculo de fuegos artificiales.